El mercado inmobiliario español se enfría: las compraventas caen un 23,7% en septiembre

La subida de los tipos de interés y la incertidumbre económica frenan el mercado inmobiliario español

La escasez de oferta mantiene los precios de la vivienda estables

17 de noviembre de 2023

El mercado inmobiliario español continúa mostrando síntomas de agotamiento en la fase final de 2023. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicados este martes muestran que las compraventas de viviendas en España registraron en septiembre un descenso del 23,7% interanual, el mayor desde junio de 2020.

En total, se registraron 44.086 operaciones, 12.752 menos que en el mismo mes del año anterior. Se trata de la cifra más baja para un mes de septiembre desde 2020, en plena pandemia.

Este descenso se debe a una serie de factores, entre los que destacan la subida de los tipos de interés, la guerra en Ucrania y la incertidumbre económica general.

La subida de los tipos de interés encarece el acceso a la financiación, lo que hace que la compra de una vivienda sea más difícil para muchas familias. La guerra en Ucrania también ha provocado un aumento de la inflación, lo que reduce el poder adquisitivo de los consumidores. Y la incertidumbre económica general hace que las personas sean más reticentes a tomar decisiones importantes, como la compra de una vivienda.

El precio de la vivienda, por su parte, sigue una tendencia distinta. Pese a lo complejo de acceder al mercado inmobiliario, la escasez de oferta frente a la elevada demanda mantiene la tensión que impide la caída del importe de la vivienda.

Sin embargo, esta tendencia podría cambiar a partir del primer trimestre de 2024. En primer lugar, porque la subida de los tipos de interés podría empezar a afectar a la demanda, reduciendo el número de compradores potenciales. En segundo lugar, porque la escasez de oferta podría empezar a disminuir, a medida que se vayan liberando viviendas de la oferta acumulada durante la pandemia.

En definitiva, el mercado inmobiliario español está entrando en un período de enfriamiento, con una menor actividad y una estabilización de los precios.

¿Qué significa este enfriamiento para los inversores?

El enfriamiento del mercado inmobiliario español tiene una serie de implicaciones para los inversores. En primer lugar, significa que las oportunidades de inversión se están reduciendo. El mercado está menos activo y los precios están más estables, lo que dificulta encontrar buenas ofertas.

En segundo lugar, significa que los inversores deben ser más selectivos a la hora de elegir sus inversiones. Es importante analizar bien las oportunidades y asegurarse de que se ajustan a su perfil de riesgo.

En tercer lugar, significa que los inversores deben estar preparados para un período de menor rentabilidad. El mercado inmobiliario está entrando en una fase de estabilización, lo que significa que los rendimientos serán más bajos que en los últimos años.

¿Qué pueden hacer los inversores para adaptarse a este cambio de ciclo?

Los inversores que quieran adaptarse a este cambio de ciclo pueden tomar una serie de medidas. En primer lugar, pueden diversificar su cartera, incorporando activos que no estén tan expuestos al mercado inmobiliario.

En segundo lugar, pueden centrarse en inversiones de menor riesgo, como las viviendas de alquiler. El alquiler es una fuente de ingresos estable, que puede ayudar a compensar la menor rentabilidad del mercado inmobiliario.

En tercer lugar, pueden buscar oportunidades en el mercado secundario. El mercado secundario suele ser más activo que el mercado primario, lo que puede ofrecer oportunidades de inversión más interesantes.

En definitiva, el enfriamiento del mercado inmobiliario español es un reto para los inversores. Sin embargo, también ofrece oportunidades a los inversores que estén preparados para adaptarse a este cambio de ciclo.

By Mr.Bongo

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